Un repaso a 2022

Queridas, ahora que se acaba el año son tiempo de reflexión y de hacer balance de todo aquello que se ha hecho. Por eso, desde El Rogle, nos gustaría compartir con vosotros las principales tareas que hemos abordado a lo largo del año 2022.

Planificamos para mejorar

Son 6 años los que hemos hecho este año como cooperativa. La mochila de experiencia se amplía y, paralelamente, el engranaje cooperativo se hace más complejo. También hemos crecido: ya somos 13 personas componiendo el equipo. Esto requiere de una planificación que hasta ahora no había sido necesaria, y más cuando algunas compañeras ya empiezan a criar! Por primera vez un miembro del equipo ha sido padre y hemos aprendido a sostener entre todas su ausencia. Pero sabemos que la cura en la crianza la podemos mejorar.

Por todo esto, hemos iniciado un Plan Estratégico cooperativo para definir las líneas metodológicas y de trabajo a seguir en los próximos años. Ha comportado muchas horas de asambleas y reflexiones, las cuales, esperamos, nos llevarán a mejorar nuestra eficiencia y a cuidarnos más.

Hagamos un repaso por los diferentes ámbitos que trabajamos desde una perspectiva jurídica y de las ciencias sociales: derecho en la ciudad y el territorio, inclusión, cooperativismo, movimientos sociales y abogacía en el sentido más ancho.

Oficinas de vivienda

Pese a que abrimos la nueva Oficina por el Derecho a la Vivienda (ODVI) de València en octubre de 2021, este ha sido el año en que la oficina ha madurado; hemos podido extraer datos positivos y el nuevo equipo se ha cohesionado. Contamos con dos trabajadoras sociales, una economista, dos juristas y dos administrativos que cada día atienden a decenas de personas que ven en riesgo su derecho a una vivienda digna. En total ya tenemos alrededor de 3000 expedientes abiertos. Se han generado materiales para facilitar las gestiones administrativas a las personas usuarias, se han hecho asesorías colectivas donde se han creado vínculos entre ellas, las hemos derivado a los sindicatos y colectivos de barrio y nos hemos coordinado con el resto de profesionales que trabajan con ellas.

También, como desde hace años, continuamos con la gestión de la oficina de vivienda de Alfafar y de Manises. Porque las capitales y las grandes ciudades no son los únicos terrenos donde se despliega la lucha por una vivienda digna.

Cada año que pasa, el acceso a la vivienda en la ciudad de València y periferia se complica. Es por esto que entendemos que es una necesidad que se aborde esta problemática desde la administración pública. Gracias a esta apuesta este año hemos podido parar muchos desahucios y llegar a numerosos acuerdos. Ojalá llegue el día en el que no sea necesaria la existencia de estas oficinas.

Derecho a la vivienda, a la ciudad y al territorio

De hecho, para facilitar la defensa del derecho a la vivienda, hemos elaborado una guía práctica de los derechos de las inquilinas junto a la Cátedra de Vivienda de la Universitat de València.

En la línea de la defensa de la ciudad y el territorio, este año hemos concluido varios proyectos como el estudio de vivienda vacía de Alboraia, el Plan Estratégico de Vivienda de Oliva y el de Vila-seca. En los tres casos ha sido principal un análisis de la infrautilización del parque residencial. Tenemos que ser conscientes de la gran cantidad de vivienda que está vacío o semi-vacío en nuestros municipios, y generar formas de movilización que hagan posible el cumplimiento de su función: ser hogar para las personas.

Además, hemos comenzado la rama de la defensa del derecho medioambiental. Estamos trabajando con Periferias y con la Plataforma por la Ubicación Racional de las Energías Renovables, con el objetivo de evitar la implementación de macro-plantas, en manos de grandes empresas, en suelos de alto valor ambiental, cultural y agrario; generando más problemas de los que se supone que pueden solucionar.

Y, también dentro del mundo rural, acabamos de iniciar un proyecto para paliar el despoblamiento. Trataremos de buscar soluciones habitacionales en los municipios despoblados del País Valenciano. Es un proyecto muy amplio, que requerirá de horas de carretera y de mucho trabajo. Por esta razón, es una necesidad y un placer compartir la tarea junto a las cooperativas Crearqció, Carpe y Fent Estudi.

Este año, hemos hecho de profesoras en el programa Polis, una iniciativa de Las Naves y de la Conselleria de Participació i Transparència. En él, hemos diseñado un programa educativo para explicar a la juventud la importancia de analizar de forma crítica las políticas públicas, y hemos ido a diferentes institutos de todo el País Valenciano poniéndolo en práctica, con muchos buenos resultados. También bajo la dirección de Las Naves, hemos desarrollado lo programa Municipios Innovadores, dentro del marco de Misiones 2030. Un plan de acompañamiento a diferentes localidades para ayudarlas a estructurar su política pública hacia un objetivo que responda a los retos de nuestra época, de forma innovadora y participada. De nuevo, hemos compartido trabajo con Crearqció y Carpe.

También con estas dos entidades amigas hemos impulsado el cooperativismo de vivienda en cesión de uso en el País Valenciano, en un proyecto desarrollado con FECOVI encaminado a estimular el surgimiento de cooperativas. Con esta última, además, hemos seguido trabajando por afianzar Domèstiques, un laboratorio de investigación e impulso del cooperativismo de vivienda en cesión de uso. Entre otros actos, asistimos al Foro de la vivienda cooperativa en cesión de uso celebrado en Barcelona.

Intercooperación

Paralelamente a la cooperación con entidades de la economía social y solidaria en proyectos concretos, este año hemos continuado con la participación en Tanda, una red de intercooperación naciente en nuestra ciudad, y con la presidencia de REAS PV, desde donde se ha empezado a implementar un nuevo Plan Estratégico. Esto está implicando, entre otros cosas, mayor incidencia política, una ampliación de la base social y una estabilidad de la estructura técnica de la red. Todo para tratar de transformar nuestro modelo productivo, y andar hacia una economía que ponga en el centro la vida, la igualdad y la interdependencia entre ecosistema, territorio y humanidad.

Abogacía

En el ámbito de la abogacía, ha sido un año donde hemos pisado mucho la ciudad de justicia. Hemos tenido un éxito de casi el 100% en la defensa de consumidores y hemos afianzado la experiencia en la ley de segunda oportunidad.

Además, tenemos que darle la bienvenida a la inauguración del área de Derecho de Familia desde una perspectiva feminista y derechos de la infancia. Comporta la realización de asesorías jurídicas en violencia de género, divorcios de mutuo acuerdo, convenios reguladores, testamentos, herencias…

En el área de Derecho penal queremos destacar el trabajo que hemos hecho defendiendo los derechos de víctimas de agresiones sexuales, que ha permitido consolidar el trabajo conjunto del departamento de género y de penal.

Y un año más, hemos defendido los derechos de los movimientos sociales, como el CSOA L’Horta y el Forn de Barraca. Dentro del ámbito de la memoria antifascista hemos añadido 6 querellas más a las 25 que llevemos ya interpuestas por torturas policiales en el tardofranquismo. Y no solo esto, también hemos viajado al Parlamento Europeo a denunciar la impunidad de los crímenes de la dictadura franquista y la transición.

Mediación

La perspectiva feminista también comporta la potenciación de la cultura de la paz a través del diálogo. Pero esto, le hemos dado un empujón a la gestión de conflictos mediante la figura de la mediación. Lo hemos hecho tanto desde el ámbito privado como desde el público: nos hemos encargado de la oficina de mediación del Ayuntamiento de Aldaia dentro del programa MediaProp.

Balance final

Todo ello, pensamos que ha sido un año lleno de retos y de aprendizajes. Hemos tenido muchos trabajos y muchas colaboradoras diferentes. Hemos emitido muchas facturas y hemos afrontado muchos gastos, pero hemos conseguido que los números cuadran. Un año más.

Ya no sentimos la cooperativa como un “joven proyecto”, sino como una realidad cada vez un poco más grande, que representa el apoyo económico estable de, ahora mismo, 13 personas. Esto es un orgullo y a la vegada una responsabilidad, que nos mantiene ilusionadas pero también alerta de cara a un futuro a corto plazo de notable incertidumbre.

2023 será un año de aplicar el que hemos pactado dentro del plan estratégico, mejorando procesos internos y optimizando nuestros servicios ofrecidos. Será un año donde buscaremos un equilibrio entre continuar en los trabajos donde ya nos consideramos expertas, y las que implican un alto grado de innovación y de autoaprendizaje.

Será un año donde continuaremos esforzándonos para tener una empresa viable económicamente que, a la vegada, es, por una parte, un espacio de cuidados y desarrollo para las personas que formamos parte; y, por otra, un mecanismo de transformación social. Ya os contaremos como nos va yendo.

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